Poemas de otoño que acogen al invierno

No sé cuál de las estaciones es la mejor. A mí me gustan todas en su momento. Aunque el otoño trae la tristeza de la oscuridad, de tener menos horas de luz, de lo introvertido y lo personal, nos regala, a su vez, una explosión de colores maravillosos.
Estas semanas pasadas, mientras iban cayendo las hojas de los árboles, nosotros hemos aprovechado para recogerlas y darles vida, amor, dolor, tristeza, pena, alegría, paz, libertad y muchas otras cosas. Hemos elaborado una actividad preciosa que me gustaría agradecer a todos los que habéis participado.
Cocinamos con cariño una receta para hacer un poema. Bueno, en realidad, para hacer tres. Cada uno de ellos tenía pautados el número de versos y las fórmulas gramaticales que había que aplicar, pero debían surgir del sentimiento que producía una música.
El primero lo producimos escuchando el tema de amor de la película "Espartaco" ("Spartacus' love theme"), tocada por el magnífico Bill Evans, pianista de jazz. En segundo lugar, escuchamos a Martirio con el pianista Chano Domínguez tocando "Soltera pa' toa la vía". Y, por último, una canción emblemática de Rosendo, "Maneras de vivir". Los sentimientos que transmitirían, en principio, serían amor, burla y reivindicación social/vital. Pero la creación poética es libre y, como tal, ha hecho surgir ideas y sentimientos de todo tipo.
Por último, lo presentamos en nuestras hojas de otoño colorido y las compartimos con el resto de alumnos del centro. Y parece que han gustado bastante a los que las han leído.
¡Enhorabuena por vuestro trabajo!